"Querido Roger:
He sabido de tu muerte anoche y es por eso que he querido escribirte unas pequeñas líneas de admiración. Te conocí tarde pero tu peculiar estilo, ese que te hizo ganador de un Premio Pulitzer en 1975, caló hondo en esta chica de provincias.
Junto a Gene Siskel fuiste el inventor de los pulgares hacia arriba y hacia abajo (Two Thumbs Up) para valorar una película. Parece una tontería pero ¡chico, qué gran invento! Pero aquí va lo más importante; fuiste un gran divulgador y uno de los críticos de cine más valorados y respetados de este gremio.
Cada maestrillo tiene su librillo, pero a lo largo de tu amplia trayectoria en prensa, televisión, internet (donde fuiste un pionero) te caracterizaste por defender con pasión tu criterio personal.
Junto a Gene Siskel fuiste el inventor de los pulgares hacia arriba y hacia abajo (Two Thumbs Up) para valorar una película. Parece una tontería pero ¡chico, qué gran invento! Pero aquí va lo más importante; fuiste un gran divulgador y uno de los críticos de cine más valorados y respetados de este gremio.
Cada maestrillo tiene su librillo, pero a lo largo de tu amplia trayectoria en prensa, televisión, internet (donde fuiste un pionero) te caracterizaste por defender con pasión tu criterio personal.
Te agradezco que no fueses de intelectualoide ni que quisieras llamar la atención mediante la polémica. Tú preferías otros derroteros, y es por eso que gracias a tu sencillez, simpatía y perspicacia, tus veredictos no pasaron desapercibidos para aquellos que amamos el cine. Por algo la revista Forbes te consideraba el crítico de cine más influyente de los Estados Unidos.
Voy a despedir esta carta de agradecimiento con la frase de uno de tus muchos libros publicados: Las grandes películas, 200 películas imprescindibles de la historia del cine. Es una frase que se me ha quedado grabada y que quiero compartir con otros cinéfilos: Tú decías que "Si nos conmueve con suficiente hondura, es algo más que una película”
Te deseo que allá en donde estés puedas tener acceso a una gran pantalla en donde proyecten tus películas favoritas. Esas que marcaron tu vida y que no te cansabas de ver, como La dolce vita, con la que aprendiste -según tus propias palabras- que "tal vez, la dulce vida no exista, pero es necesario saberlo por uno mismo".
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| Cuenta Roger Ebert que en su juventud soñaba con la vida del protagonista |
PD: Aprovecho para compartir la lista que se publicó en la revista Sight & Sound de tus diez mejores películas de la historia."
- 2001: Una odisea en el espacio (Stanley Kubrick, 1968)
- Aguirre, la cólera de Dios (Werner Herzog, 1972)
- Apocalypse Now (Francis Ford Coppola, 1979)
- Ciudadano Kane (Orson Welles, 1941)
- La dolce vita (Federico Fellini, 1960)
- El maquinista de la General (Buster Keaton, 1926)
- Toro salvaje (Martin Scorsese, 1980)
- Cuentos de Tokio (Yasujiro Ozu, 1953)
- El árbol de la vida (Terrence Malick, 2010)
- Vertigo (Alfred Hitchcock, 1958)
Muy emotiva tu carta. Enhorabuena por el texto!
ResponderEliminarRoger ya no éstá pero nos deja un colosal número de artículos, una fuente maravillosa de la que manan conocimientos infinitos sobre cine.
Saludos María José!
Muy bonito homenaje :) no tenía ni idea de lo de los pulgares! y, aunque no siempre coincido con el gran Ebert, me alegra encontrar en su lista a Cuentos de Tokyo y El árbol de la vida. Echaré de menos saber qué opina de las nuevas películas... Un saludo!
ResponderEliminarMuchas gracias chicos!
ResponderEliminarPara mí era y es un maestro, y nos deja un gran legado de libros, artículos...
Un saludo.
Bonito homenaje. Un profesional digno de admiración para aquellos que amáis escribir sobre cine. Saludos!
ResponderEliminarQué bonito María! Un homenaje muy sentido y especial el que has dedicado al grandísimo Roger. Sabes que yo también le admiraba muchísimo así que entiendo todo lo que deseas transmitir con estas palabras.
ResponderEliminarYo estoy en plena lectura de "100 películas imprescindibles de la historia del cine" y hay tantísimas frases que podríamos incluir en una de estas entradas... Lo bueno es que gracias a estos libros, a su página, a sus críticas, jamás se le olvidará... Otra cosa no pero la escritura también convierte en eternos a sus autores.
Seguro que Ebert sigue viendo mucho cine allá dando esté.
Grandísimo trabajo compañera :). ¡Un fuerte abrazo!
Muchas gracias Bea y Charlie, la verdad es que le tengo mucho cariño a este señor, y como bien dices Bea gracias a sus libros, sus críticas... no le vamos a olvidar nunca.
EliminarUn abrazo y gracias por vuestras palabras!
This is awesome!
ResponderEliminarMuy buena tu carta. Tengo como una obra preciada los 2 primeros tomos de las películas preferidas de Roger Ebert y estoy esperando que aparezca traducido al castellano el tomo 3. Cuando lees sus críticas es como si le encontraras un nuevo sabor a las películas fundamentales.Saludos desde Tucumán, Argentina.
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