Enamorados de los ochenta
Modesto (Raúl Arevalo) que es profesor y en ocasiones ve muertos. Esto le ha ocasionado más de una visita al psiquiatra y que le despidan de todos los colegios donde ha trabajado. Su suerte cambia cuando consigue plaza en el instituto Monforte, un centro temido por los profesores. Allí sus poderes a lo niño del Sexto Sentido no desentonarán tanto y tendrá que dar clase a cinco alumnos que han convertido este colegio en una pesadilla. Modesto tiene que lograr que los cinco chicos aprueben el último curso y se larguen de allí de una vez por todas. Pero no lo va a tener fácil: los cinco llevan veinte años muertos.
El club de los cinco (1985) |
La trama y así lo ha reconocido el propio director es una
mezcla de dos géneros completamente opuestos: el de fantasmas y la temática
adolescente de high school americano. El director ha metido en la batidora El
sexto sentido y El club de los cinco, esa cinta convertida en película
de culto donde aparecía la chica de rosa,
Molly Ringwald, y Emilio Estevez
entre otros. Aunque también hay guiños a otras muchas pelis como Regreso al futuro e incluso uno de la famosa escena de Carrie.
Promoción fantasma es una comedia divertida,
simpática, de consumo rápido. No sigue la línea de la ópera prima de su
director. Aquí no abundan las bromas políticamente incorrectas o soeces
(si exceptuamos el calvo de Carlos Areces). De hecho, a veces peca un poco de dulzona (historia de amor entre uno
de los muertos y una estudiante).
Tiene un buen reparto en donde destacan Raúl Arévalo (uno de los mejores actores de su generación) Alexandra
Jiménez, Silvia Abril (quién se lleva algunas de las partes más graciosas del filme) Carlos
Areces, Luis Varela (haciendo otra vez de muerto que habla como en Crimen
Ferpecto) o los jóvenes Anna Castillo o Javier Bódalo. Sin olvidar, al robaplanos
de Joaquín Reyes (Muchachada Nui, Museo Coconut) interpretando a un psiquiatra
obsesionado con los hoyos.
Lo mejor: La mezcla de géneros. Saldrás
del cine cantando Total eclipse of the
heart de Bonnie Tyler. Manuela, la conserje (Silvia Abril). El momento que se marca la
fantasma empollona cantando el Estoy aquí de Shakira. La consejera de educación con cierto parecido a una importante política.
Lo peor: En ciertos momentos, el tono es
un poco televisivo. Intenta tocar algún tema importante (suicidio juvenil) pero
no es la película apropiada para eso.
Nota: 5,8
Pero si son feisimos!
ResponderEliminarPues por el malote moreno y el rubiales están locas las adolescentes, que yo lo he visto por ahí :)
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